El gobernador Ricardo Quintela visitó este jueves la Casa de la Memoria, ubicada en la calle Adolfo Dávila, un espacio que recuperó la Provincia y que funcionó como centro clandestino de detención durante la última dictadura militar.

En ocasión de esta visita, Délfor Brizuela destacó la lucha por los derechos humanos y la necesidad de recuperar la casona de calle Adolfo Dávila como espacio de la memoria.
«El terrorismo de Estado en La Rioja no comenzó el 24 de marzo de 1976 sino que se inició con la instauración de esa ley cuestionada jurídicamente, de seguridad, que habilitó a que el Estado reprimiera a su pueblo y que funcionaran en ese momento cuerpos especiales totalmente ilegales», contextualizó.
El funcionario destacó que en todas las gestiones anteriores «el sueño era rescatar esta casa para la memoria y para lo que la memoria provoca en el presente y en el futuro».
Por otra parte, Brizuela dijo que el reclamo por la aparición con vida de las personas desaparecidas «fue una lucha incesante y muy difícil». «Y al principio fue una lucha en soledad, fue contrahegemónica porque fue en un momento en que dar la vuelta a la plaza era ante una total indiferencia de gran parte de la sociedad. A esa lucha la comenzaron las Madres de Plaza de Mayo, después la siguieron los ex Presos Políticos y luego fue creciendo, y el pueblo se fue integrando y sumando, como todos los proceso populares que empezaron con una semillita y después se van haciendo mucho más grandes», dijo.
En este punto, el titular de Derechos Humanos destacó la decisión política del gobernador Quintela de recuperar la casona como espacio de la memoria. «Esa lucha necesitaba de que quienes representan al pueblo en democracia, interpretaran esa lucha, se hicieran cargo y tomaran decisiones. Y ese fue Ricardo Quintela, quien tomó la decisión de decirnos que esto se iba a concretar. Y lo anunció el Gobernador en la apertura de sesiones de la Legislatura el pasado 1 de marzo», resaltó.
En tanto, la ministra Gabriela Asís dijo que «este día de los Derechos Humanos, donde se ha recuperado un inmueble que desde 2016 estaba el trámite, estaba parado». «Y fue una decisión del gobernador Quintela de recuperar este inmueble que va a funcionar como espacio de memoria, que se tiene que restaurar casi en su totalidad y que tiene un valor emocional e histórico muy importante», señaló.
Por su parte, el referente de los ExPresos Políticos, Lucho Gómez, dio un sentido discurso recordando lo que significó la lucha durante la dictadura militar. «Fuimos toda una generación que emprendimos una lucha. Muy tempranamente. Entre 20 y 30 años fue la edad promedio de toda esta generación a la que aniquilaron. Pocos fuimos los sobrevivientes, pero los que quedamos tenemos una deuda moral muy grande y que es con aquellos compañeros que nunca tuvieron la posibilidad de llegar a un juicio justo, compañeros que fueron muertos en campos de concentración», afirmó.
Gómez también reivindicó la decisión política del Gobierno de recuperar este inmueble como Casa de la Memoria. «Más de 10 mil presos políticos tuvieron las cárceles argentinas e infinidad de chicos apropiados, miles de exiliados, desocupados, perseguidos. Esta es la consecuencia de lo que fue la Dictadura. Por eso es tan importante cuando la lucha se junta con una decisión política. Este hecho es fundamental a tener en cuenta», aseguró.
Luego, el expreso político recordó el horror que, en los años oscuros, se vivió en la casona de la calle Adolfo Dávila. «Esta casa, que fue una gran casona y muy reconocida en su momento, aquí funcionó a partir del 23 de marzo del 75 cuando son los primeros compañeros que fueron detenidos. Después fueron cayendo más de 30 compañeros. Aquí se torturó y lo grave es que sucedió bajo un gobierno constitucional y esto era una repartición pública al servicio del cuidado de los ciudadanos argentinos. Y sin embargo aquí se torturó, se violó, se cometieron hechos aberrantes», expresó.
Agregó: «Nosotros queremos decir que esta casa se pueda convertir en un espacio de la memoria para que quede documentado y establecido, como lo declaró el Tribunal Federal, como un centro clandestino de detención. Para que el pueblo sepa qué es lo que pasó y a qué le decimos Nunca más. Y para eso tenemos que saber qué paso, y adonde y quienes fueron los que hicieron estas cosas. Es fundamental que la docencia y la enseñanza superior transmita estas cosas para que formemos a ciudadanos, esto fortalece a las instituciones y a la democracia».
Gómez sostuvo que lo que más se rescata de la generación que fue aniquilada por la Dictadura «fue la gran dosis de entrega que tuvieron todos los compañeros». «No hagamos prevalecer las pertenencias políticas ni las mezquindades, porque cuando nos vinieron a llevar no nos preguntaron si éramos peronistas o marxistas. Queremos reivindicar a todos nuestros compañeros desaparecidos, a todos nuestros presos políticos, sin banderías ni sectarismos. Muchos estuvimos al borde de la muerte», manifestó.
Por último, el dirigente resaltó que los ex presos políticos «resistimos en la cárceles, nunca nos entregamos, nunca dimos información, ni un dato, nunca colaboramos con el enemigo». «Por los 30 mil compañeros desparecidos, presente!», concluyó.
Quintela realizó esta visita acompañado por la vicegobernadora Florencia López; el ministro de Educación, Ariel Martínez; el diputado provincial Ricardo Herrera; y miembros de la Asociación de Ex Presos Políticos y el Colectivo Hijos de Ex Presos Políticos, entre otros.