Por la final de la UEFA Europa League, Chelsea derrotó 4-1 a Arsenal con goles de Giroud, Pedro y un doblete de Hazard. El duelo se disputó en el estadio Olímpico de Bakú, Azerbaiyán.
Los «blues» se quedaron con el título en un partido equilibrado en el primer tiempo y resuelto con sencillez en el segundo, en el que le hizo tres goles al Arsenal en los primeros veinte minutos. Hazard fue la figura partido, autor de un doblete; pero el español Pedro tuvo también una actuación soberbia. Marcó un gol y fue un peligro constante.
Parar llegar a esta definición, el equipo de Unai Emery venció en semifinales al Valencia y los de Maurizio Sarri hicieron lo propio con Eintracht Frankfurt. Ambos equipos son provenientes de Londres, capital inglesa.
En el contexto de una final, el partido se jugó con pocos recaudos, con dos equipos que no especularon. La primera mitad fue abierta, con juego ida y vuelta, aunque pocas chances de peligro. La mejor ocasión del Chelsea, en este tramo, fue un tiro del francés Giroud detenido por Cech y la de los «gunners» fue un remate de Xhaka que se fue alto por poco.
Recién en el segundo tiempo, pudo romperse la paridad con un centro de Emerson, que Giroud capitalizó con un gran cabezazo y así venció la resistencia del experimentado Peter Cech. El arquero checo jugaba su último partido, ya que, tras el mismo, dejó la actividad profesional. La celebración del goleador francés fue contenida, por su pasado en el Arsenal.
El gol fue muy sentido para los de Emery, que empezaron a desequilibrarse. A los 15 minutos, en un remate mordido y poco ortodoxo, Pedro logró el 2-0, tras una asistencia de Hazard. Y si no fuera poco, enseguida llegó el 3-0 en una jugada iniciada otra vez por Pedro que terminó en penal a Giroud por infracción de Maitland-Niles. Hazard no perdonó desde los doce pasos.
Con muy poca resistencia, el Arsenal pudo dar lugar a la ilusión con un gran gol de Iwobi y marcar el 1-3. No le iba a durar tanto debido a que, al minuto 27 del complemento, Chelsea sentenció el pleito y la goleada 4-1, por medio de una asistencia de Giroud que concretó Hazard, segundo en su cuenta personal. Detalle no menor: el crack belga jugó su último partido en el conjunto «blue», fue un «adiós» como él lo marcó.
El resultado mostró a un Chelsea que supo golpear en el momento preciso para desequilibrar el marcador a su favor y consagrarse campeón de esta edición de la UEFA Europa League.