«Las medidas que vamos a tomar va a ayudar a cicatrizar las heridas de la inflación. Seguramente, este semana se anuncien», dijo Sergio Massa, esquivando al colega de Clarín. Del mismo modo, como consecuencia de la devaluación del dólar oficial del 22%, el titular del Palacio de Hacienda anunciará medidas para paliar esta situación.
Por otro lado, la ministra de Trabajo Raquel «Kelly» Olmos evitó dar detalles al respecto: «no voy a dar precisiones», dijo la funcionaria.
De hecho, el secreto a sotto voce, de la suma fija, lo confirmó hace unos días Massa, a raíz de la dura derrota electoral en las PASO. Pero, la incertidumbre, la devaluación y la suba de precios, obligó a los referentes gremiales a reclamar una suma fija.
Es más, la mayoría de los gremios del sector privado reabrieron sus paritarias, gestó que se replicó en los gremios del sector público. En tanto, el ala sindical del kirchnerismo también pide una suma fija de emergencia.
El pedido de los gremios díscolos de la CGT
«Pedimos una suma fija para todos los trabajadores, no inferior a los $75.000», dijo el titular de la CTA de los Trabajadores Hugo Yasky. También, reclamó un adelanto del pago en cuotas del aumento del Salario Mínimo Vital y Móvil, y además una suba de emergencia para jubilados y beneficiarios de asignaciones familiares: «es hora de mostrar que este es un Gobierno popular, que está a favor de los laburantes», expresó.
Asimismo, se sumó el pedido de su par de ATE Hugo «Cachorro» Godoy: «la suma fija debe ser de $100.000 para todos los trabajadores privados y públicos», remarcó.
Por otro lado, también se sumó al pedido de esta suma, el referente de la Asociación del Personal Legislativo (APL) Norberto Di Próspero: «estamos en una situación de emergencia, por lo cuál la suma fija debe ir para todos los trabajadores públicos y privados», enfatizó.
La CGT toma distancia
Entre tanto, los gremios enrolados en la Confederación General del Trabajo (CGT) tomaron distancia de los sindicatos alineados al kirchnerismo. Es más, piden que la suma fija vaya para los salarios más bajos.
«Nosotros no nos opones a la suma fija, pero si que se sostenga el mecanismo de las paritarias, y que se defina un valor mínimo de ingresos a través de un bono variable», dijo uno de los triunviros de la central obrera Héctor Daer.
En esa línea, se manifestó el titular de UPCN Andrés Rodríguez: «si la suma fija va para los salarios más bajos no nos opones, siempre manteniendo la dinámica de las paritarias». En ese tono, admitió que hay que atender la urgencia de los asalariados más bajos, como es el caso de los trabajadores Municipales.
El conflicto con los Intendentes y Gobernadores
Precisamente, lo que ratificó Massa de la suma fija para aquellos salarios más bajos, desató un conflicto con los Intendentes y Gobernadores, cuyas administraciones aglutinan a los trabajadores formales de menores ingresos, por lo cuál deberían asumir un costo fiscal millonario para implementar la medida.
De acuerdo a los datos oficiales, en total se contabilizaron 3.429.784 trabajadores públicos en todo el país. De lo cuáles, 342.678 personas trabajan directamente en la Administración Pública o en empresas y sociedades que dependen del Estado. Mientras que casi 2,3 millones de trabajadores se desempeñan como personal de los estados provinciales, y cerca de 700.000 trabajadores se desempeñan en los Municipios.
Sin embargo, los trabajadores Municipales perciben un salario entre un 15% y un 20% menor al resto de los trabajadores del sector público.
«En algunos municipios de la provincia de Buenos Aires, los salarios son de $30.000, y hay Municipios que pagan salarios bajos que tienen millones de pesos en plazos fijos», disparó el titular de la Confederación de Trabajadores Municipales (CTM). El mismo participó de una reunión con el ministro de Economía, destinado a analizar la situación de los trabajadores del sector.