El nuevo consejero delegado, Pekka Lundmark, impulsa un modelo operativo más organizado y rentable.

La compañía tecnológica finlandesa Nokia presentó este martes un plan de reestructuración que contempla el despido de hasta 10.000 empleados -el 11 % de su plantilla actual- antes de finales de 2023, a fin de recortar sus costes productivos.
Nokia explicó en un comunicado que la reestructuración de sus negocios tendrá un coste de entre 600 y 700 millones de euros, a distribuir durante los ejercicios 2021, 2022 y 2023, y supondrá el cese de entre 5.000 y 10.000 trabajadores, dependiendo «de la evolución del mercado en los próximos dos años».
El objetivo de Nokia es ahorrar cerca de 600 millones de euros anuales al final del ejercicio 2023 para financiar el aumento del gasto en investigación y desarrollo (I+D), especialmente en tecnologías relacionadas con el 5G, la computación en la nube y la infraestructura digital.