EXPECTATIVA. El buque “Seabed Constructor” zarpó de Comodoro Rivadavia para tratar de hallar al submarino
Poco después de las 14.30 del último viernes el buque “Seabed Constructor” de bandera noruega zarpó desde el puerto de Comodoro Rivadavia con la misión y la esperanza de dar con el submarino “ ARA San Juan” desaparecido el 15 de noviembre pasado.
Además del personal técnico a bordo viajaron cuatro familiares de los 44 tripulantes del submarino como veedores, quienes serán testigos de la misión.
Según consignó ADN Sur, la búsqueda, cuya licitación internacional ganó la empresa Ocean Infinity, se centrará en un área a unas 300 millas en línea recta desde Comodoro Rivadavia, a unos 600 kilómetros de la ciudad. El capitán de navío de la Armada Argentina, Rodolfo Ramallo, aseguró que “es un momento emotivo y especial para todos los que vivimos de cerca esta situación que nos tiene en vilo. Estamos colaborando y trabajando codo a codo”.
Y señaló: “La zarpada del buque materializa la esperanza de muchos argentinos para poder encontrarlo”.
Información constante
La causa tiene trece cuerpos, 50.000 fojas, decenas de allanamientos y 52 declaraciones testimoniales.
La jueza de Caleta Olivia, Marta Yáñez dijo que “le pedirá al capitán del barco que busca al “ ARA San Juan” información constante sobre el operativo” y agregó que “todos tenemos esperanza que se pueda encontrar el buque. Sabemos que tenemos una geografía complicada en la plataforma submarina con muchos cañadones”.
En las actuaciones que hizo el Juzgado se presentaron en calidad de querellantes 26 familiares directos de tripulantes desaparecidos, quienes, a través de sus abogados, pueden acceder a la causa, controlar y ofrecer pruebas.
En el transcurso de la instrucción se dispuso que la causa se tramite en carácter de reservado para que no se ventilen datos contenidos en documentos que pudieran contener el carácter de clasificación de seguridad nacional.
La empresa estadounidense Ocean Infinity dispondrá de 120 días para la búsqueda y sólo cobrará su contrato por 7,5 millones de dólares si el buque “Seabed Constructor” halla la nave.
El submarino desapareció tras reportar el 15 de noviembre de 2017 un incendio en el área de baterías por el ingreso de agua de mar mientras navegaba desde la ciudad de Ushuaia rumbo a su base en el puerto de Mar del Plata.
Horas después de la última comunicación se detectó un ruido similar al de una explosión cerca del último punto donde había sido localizado en el océano Atlántico, a poco más de 400 kilómetros de la costa argentina, frente al patagónico Golfo San Jorge.
El “ ARA San Juan” fue buscado intensamente por una enorme flota internacional de buques y aviones pero sin éxito. Tras suspender la búsqueda durante varios meses, el gobierno argentino contrató a la firma Ocean Infinity para que encuentre a la nave.
Cómo será el operativo
El “Seabed Constructor” lleva cuatro submarinos AUV con una autonomía de 45 horas para rastrear el lecho marino.
“Según la empresa, en diez días tienen que tener barrida toda la zona donde se supone que explotó el submarino”, remarcó el ministro de Defensa, Oscar Aguad.
“Es de los barcos más modernos para este tipo de búsqueda. Por sus características y toda la tecnología que lleva adentro nos hace tener mucha expectativa de que pueda encontrar al submarino”, agregó.
Intenso entrenamiento
El abogado Luis Tagliapietra, padre de Alejandro, uno de los 44 tripulantes del “ ARA San Juan”, es querellante en la causa que investiga la desaparición del submarino y uno de los cuatro familiares veedores de la búsqueda, que está a cargo de la empresa Ocean Infinity.
Para formar parte de la tripulación del navío noruego “Seabed Constructor”, se sometieron a un intenso entrenamiento con el objetivo de superar las pruebas físicas y psicológicas impuestas por las autoridades de la embarcación que en los próximos días emprenderá un histórico viaje con el único fin de hallar la unidad naval.
Las pruebas médicas, físicas y psicológicas fueron arduas. Las primeras dos incluyeron análisis de sangre, orina, electrocardiograma, exámenes de vista, capacidad auditiva y una ergometría. A su vez, los veedores pasaron por exámenes psicológicos para determinar su estado emocional. La serie de análisis y la aprobación final de los exámenes estuvo a cargo de las autoridades noruegas.
Los familiares también debieron aprender conceptos básicos de navegación, a fin de garantizar que la búsqueda no será interrumpida bajo ninguna circunstancia, excepto una emergencia.
Además, se les exigió tener conocimientos de inglés, ya que es el único idioma que se habla en el buque.
Junto a Tagliapietra, estarán Silvina Krawczyk (hermana de Eliana Krawczyk), José Luis Castillo(hermano de Enrique Castillo) y Fernando Arjona (hermano de Alberto Arjona). Como si fuera poco, los veedores se sometieron a capacitaciones en supervivencia y escape.
A su vez, en la pileta de la Armada, los familiares aprendieron a utilizar los elementos de supervivencia. Allí se les infló una balsa salvavidas y se implementó se llevó adelante un simulacro de emergencia.