En el acto por el centenario de la escuela Juan Arzeno, el gobernador consideró «válido» el llamado al diálogo si hay disposición del gobierno nacional a modificar «la política económica».
El gobernador de la provincia Miguel Lifschitz reveló hoy que analizará la carta de 10 puntos que envió el presidente Mauricio Macri a los principales dirigentes opositores para buscar un marco de previsibilidad política aunque aclaró que «es un momento complejo para lograr a un acuerdo porque estamos atravesando un proceso electoral».
«Ayer recibí una carta del presidente donde plantea esos 10 puntos que lógicamente tendremos que analizar. De todos modos, es un momento complejo para un acuerdo porque estamos atravesando un proceso electoral», dijo el mandatario provincial al ser consultado por la prensa en el acto por el centenario del Escuela Juan Arzeno.
Lifschitz consideró, sin embargo, que «es válido siempre una convocatoria al diálogo en la medida que sea abierta, que haya disposición para efectuar cambios en la política económica».
El gobernador planteó que para llegar a un acuerdo «hay que pensar en una política que traiga soluciones al problema de la Argentina, de la pobreza, del empleo y la inflación. Si hay voluntad para rectificar políticas y hacer acuerdos sobre eso creo que es valioso».
Consultado sobre si la convocatoria del gobierno podría ser considerada como un «manotazo de ahogado», Lifschitz evaluó: «Siempre una convocatoria al diálogo para construir políticas de Estado es más lógico que se haga en el inicio de la gestión o a la mitad de la misma cuanto mucho. Pero nunca es tarde, cualquier momento es bueno».
Y agregó: «La crisis económica que atraviesa el país y la incertidumbre que existe sobre lo que va ocurrir en los próximos meses por lo menos amerita que haya diálogo y acuerdos entre los partidos, ya sea los que están en el oficialismo como los de la oposición».
Sobre cómo marchaba la conformación del espacio político junto al exministro de Economía Roberto Lavagna, Lifschitz dijo que se viene «avanzando».
«Hay reuniones muy frecuentes -indicó el titular de la Casa Gris-. Es muy clara la decisión de Lavagna de competir, de ser parte del proceso electoral por la presidencia. Si bien no lo ha formalizado, es claro que por sus intervenciones públicas ha tomado ya una decisión. Lo que falta es terminar de cerrar un armado político que le dé sustento».