El presidente volvió a arremeter contra cuatro congresistas demócratas de orígenes étnicos diversos durante un acto de campaña.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a arremeter contra cuatro congresistas demócratas de orígenes étnicos diversos durante un acto de campaña, y los miles de asistentes le mostraron a gritos su efusivo apoyo a su sugerencia de que “vuelvan a sus países”, pese a que son todas estadounidenses.
A pesar de las críticas y acusaciones de racismo recibidas durante los últimos días por haber instado a las congresistas a abandonar el país, el mandatario republicano las calificó nuevamente de “extremistas” en su acto de anoche en Greeville, informó la cadena de noticias local ABC.
Trump, que anteriormente las había acusado de “escupir” algunas de las expresiones “más viles, odiosas y asquerosas que haya dicho nunca un político en la Cámara de Representantes o el Senado”, señaló que las congresistas “están contribuyendo a crear e impulsar una militancia peligrosa de extrema izquierda”.