En febrero llega a las salas argentinas el documental de los directores uruguayos Facundo & Juan Ponce de León: “Hay una puerta ahí”, una película sobre el enfermo terminal más sano del mundo.
Fernando Sureda tiene ELA y quiere la eutanasia. Pelea por sacar la ley en Uruguay y por ser el primero en aplicarla. En ese camino, el 20 de octubre de 2019, tiene una charla por Zoom con Enric Benito, un médico español especializado en cuidados paliativos. La vida sin embargo les tenía preparada una última sorpresa, una amistad muy especial y un viaje final que nadie imaginaba.
Fernando Sureda
Fernando Sureda fue gerente de la Asociación Uruguaya de Fútbol. Falleció a los 70 años a causa de una enfermedad neurológica degenerativa llamada esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Padecía la enfermedad desde 2016, aunque se le diagnosticó en 2018. Fue un destacado protagonista en la lucha por la eutanasia legal en Uruguay, junto a su familia, y deseaba ser el primero en aplicarla.

Enric Benito
Enric Benito (Mallorca, 1949) se licenció en Medicina en la Universidad de Zaragoza en 1972. Hizo la especialidad de Oncología Médica en el hospital Sant Pau de Barcelona en 1976 y se doctoró en Medicina por la Universidad de Barcelona en 1990. Realizó el Máster en Cuidados Paliativos en la Universidad de Barcelona en 2000. Ha sido coordinador de la Unidad de Cuidados Paliativos del hospital Virgen de la Salud y del hospital Joan March en la isla de Mallorca entre 1999 y 2009. Coordinador del Programa Autonómico de Cuidados Paliativos de las Islas Baleares entre 2010 y 2017 y coordinador del Grupo de Espiritualidad de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) entre 2006 y 2015. Es miembro de Honor de la SECPAL desde 2014. Actualmente es profesor invitado en varias universidades españolas, portuguesas y de América Latina.
DIRECTORES
Facundo Ponce de León

Es un comunicador que creó un estilo que conecta con el público y con sus entrevistados con una profundidad muy especial. La calidad de los productos audiovisuales que ha creado son un complemento ideal para la calidez de su conducción. Esas condiciones naturales las combina con un trabajo intelectual que lo convirtió en una de las personalidades más creíbles de Uruguay. Nació en Montevideo en 1978 y es Doctor en Filosofía por la Universidad Carlos III de Madrid. Entre sus intereses a la hora de crear contenidos se destacan los temas vinculados a la vejez, los cuidados, el arte, la historia y la política. Facundo integra una nueva generación de comunicadores y su lugar fue cambiar la forma de presentar grandes temas en la pantalla y encontrar una nueva manera de contar pequeñas historias y hacerlas universales.
Juan Ponce de León

Tiene una sensibilidad en su narrativa que ha generado reconocimientos a nivel nacional e internacional. Su dirección en películas documentales, creaciones televisivas y cortometrajes tiene un estilo que lo distingue. Una mirada profunda, creación de climas conmovedores y composición de encuadres que logran que el espectador sienta que está dentro de sus películas. Montevideano, nacido en 1985, egresado de la Escuela de Cine del Uruguay, como director y montajista, realizó múltiples programas de TV, dirigió documentales y participó en diversas ficciones. La calidad en sus creaciones lo ha convertido en el realizador elegido por prestigiosas marcas para dirigir branded content de alta calidad narrativa. .Juan es parte de la nueva generación de directores uruguayos que se han proyectado al mundo y ya ha obtenido reconocimiento.
HISTORIA DEL PROYECTO
Fernando tiene ELA y quiere la eutanasia. Pelea por sacar la ley en Uruguay y por ser el primero en aplicarla. En ese camino, el 20 de octubre de 2019, tiene una charla por Zoom con Enric Benito, un médico español especializado en cuidados paliativos. La vida les tenía preparada una última sorpresa, una nueva amistad y un viaje final que nadie imaginaba.
A través de los nueve meses de encuentros virtuales entre Fernando y Enric, “Hay una puerta ahí” devela la transformación por la que ambos transitan, a través de una nueva mirada de la realidad y de una nueva forma de entender la vida, y de cómo el sufrimiento y el proceso de morir, dan lugar a un nivel de aceptación, gratitud y desapego, absolutamente alejados de la perspectiva desde la que partía Fernando.