El jueves 22 de mayo se realizó el Acto Público por el 10º aniversario del Museo Sitio de Memoria ESMA, en el que estuvieron presentes sobrevivientes del Centro Clandestino ESMA, integrantes de organismos de Derechos Humanos, Embajadores, organizaciones de la sociedad civil, académicos, diputados y diputadas nacionales y locales, representantes del Poder Judicial y todo el equipo de trabajadores y trabajadoras del Museo Sitio.
En el acto hicieron uso de la palabra el arquitecto y docente de la UNSAM, Martín Capeluto; Guillermo Pérez Roisinblit, nieto restituido e integrante de la Comisión Directiva de Abuelas de Plaza de Mayo; Ana María «Rosita» Soffiantini, sobreviviente del Centro Clandestino ESMA y miembro del del Consejo Asesor del Museo Sitio; la ex jueza federal, María del Carmen Roqueta; y la Lic. Mayki Gorosito, directora ejecutiva de la institución.
«Cuidando la memoria, transmitiendo la verdad y acompañando a la justicia»
La conmemoración del aniversario tuvo como lema «Cuidando la memoria, transmitiendo la verdad y acompañando a la justicia». Al inicio del acto se proyectó un video del edificio del ex Casino de oficiales de la Marina antes y después de la puesta museográfica que representa al Museo Sitio.
Luego agradecer a las más de 150 personas que se encontraban presentes en la Sala Dorado del Museo Sitio, tomó la palabra el arquitecto Martín Capeluto, quien formara parte del equipo interdisciplinario, conformado por profesionales del Instituto de Arquitectura y Urbanismo de la UNSAM, que estuvo al frente del proyecto de transformación del edificio del ex Casino de Oficiales de la ESMA, en Museo Sitio de Memoria ESMA, finalizado en 2015.
Capeluto se refirió al importante trabajo realizado en cuanto al cuidado del patrimonio y las implicancias de la puesta museográfica en un edificio que es prueba judicial, y expresó: “Es importante señalar que este museo de sitio nació de una voluntad clara del Estado nacional por las políticas de memoria verdad y justicia. Y que cada texto, cada intervención del edificio respetó su doble condición de monumento histórico nacional y prueba judicial de los crímenes de lesa humanidad aquí cometidos.”
Por su parte, Guillermo Roisinblit, nieto restituido N°68, agradeció la invitación y relató parte de su historia y su vinculación con el edificio: «Yo nací aquí. Esa frase tan simple y al mismo tiempo tan desgarradora encierra toda la magnitud de lo que este sitio representa. No nací en un hospital, rodeado de alegría y esperanza y luz, sino en un sótano convertido en enfermería y maternidad clandestina por la dictadura”.
Asimismo destacó la importancia de que un lugar como el Museo Sitio sea preservado y valorado como un emblema de las políticas de memoria, verdad y justicia: “La transformación de este espacio, de centro clandestino a sitio de memoria, demuestra por qué necesitamos instituciones públicas como esta. Sin voluntad política la memoria se desvanece y con ella la posibilidad de justicia”.
Para concluir agregó: “Este museo como institución pública cumple una función esencial que ninguna iniciativa privada podría asumir: garantiza que la memoria no quede a merced de los vaivenes políticos, ni de arbitrarias reinterpretaciones. Aquí la verdad documentada se vuelve patrimonio colectivo, irrenunciable, indiscutible, intocable”.
Después de las palabras de Roisinblit, se proyectaron videos de apoyo de Ernesto Ottone Ramírez, Subdirector General de Cultura de la UNESCO; Piotr Cywiński, Director del Memorial de Auschwitz-Birkenau, Patrimonio Mundial de la UNESCO; Jordi Guixé i Coromines, historiador español, director y fundador del Observatorio Europeo de las Memorias (EUROM); Saia Vergara, viceministra de Cultura del Gobierno de Colombia; Janine Mello, secretaria Ejecutiva del Ministerio de Derechos Humanos y Ciudadanía, del Gobierno de la República Federativa de Brasil, Estado parte del Mercosur; y de la vicepresidenta de la República Oriental del Uruguay, Carolina Cosse.










Un faro de memoria viva
Finalizada la proyección se invitó a tomar la palabra a Ana María «Rosita» Soffiantini, sobreviviente del Centro Clandestino ESMA y testimoniante en los juicios de Lesa Humanidad, quien señaló: “Este fue un trabajo colectivo que convirtió el sitio en prueba judicial. Acá, que era un centro clandestino de detención, tortura y exterminio, logramos que sea un faro de memoria viva. En este lugar circula la vida.”
Además, Soffiantini destacó la relevancia del Museo Sitio “Este sitio es la evidencia de lo que nos pasó a toda la sociedad, no a nosotros solamente, sino a toda la sociedad argentina. Es denuncia que interpela el presente y resiste al olvido.
Para concluir, expresó emocionada: «Por eso decimos no al vaciamiento de la memoria, no al cierre de lo de espacios construidos con verdad y justicia, no al olvido planificado, sí al compromiso activo, sí a la defensa de cada trabajador y trabajadora que sustenta los espacios”
En representación de la justicia, la ex jueza María del Carmen Roqueta, quien tuvo a su cargo causas referidas al plan sistemático de robo de bebés en el contexto del terrorismo de Estado, se refirió al poder judicial, y su rol en la obligación del cumplimiento de las leyes: “Como poder del Estado, el poder judicial de la nación debe ejercer el cumplimiento de las leyes y de nuestra Constitución nacional porque aquellos países que se olvidan de esto no tienen un buen futuro. “Solamente respetando la ley, se logra la paz».
Roqueta también destacó la importancia del Museo Sitio para la sociedad: “Esto no es de un partido político, esto no es una fracción de un partido o de un sector político. Este lugar es de la sociedad argentina, esto es de todos y de todas».
Un momento de mucha emoción
La última oradora fue la directora ejecutiva del Museo Sitio, Mayki Gorosito, quien comenzó su discurso expresando: “Es un momento de mucha emoción, pero igualmente aquí todos los días son de mucha emoción porque a nosotros y nosotras lo que aquí trabajamos y los que trabajaron, nos llena de orgullo y de honra poder sostener este lugar”.
Gorosito señaló además: “Cumplimos 10 años y llegamos aquí habiendo alcanzado grandes logros”, para dar comienzo a lo que fue un repaso de los hitos y logros del Museo Sitio durante estos 10 años, entre los que se destacan las visitas de presidentes y presidentas, fortalecimiento de vínculos internacionales, infinidad de visitas de escuelas, instituciones educativas y universidades y, por supuesto, el reconocimiento regional, como Patrimonio Cultural del Mercosur, y a nivel mundial, como Patrimonio Mundial de la UNESCO.
“Somos una institución del Estado argentino no de un partido, no de un gobierno. Una institución que simboliza y testimonia lo que nunca más debe suceder. Una institución reconocida por el mundo por hacer como hacemos, lo que es nuestra obligación y nuestra convicción. En esta coyuntura triste lamentable y compleja para las políticas públicas de derechos humanos, renovemos nuestro compromiso y nuestra convicción traducida en acción, de que las instituciones como el Museo Sitio de Memoria ESMA son imprescindibles para la democracia”.
Gorosito también señaló: “Nosotros, los que aquí tenemos la inmensa honra de trabajar, queremos seguir adelante, debemos seguir adelante, debemos ser capaces también, cada uno desde nuestro rol, de construir un país justo y próspero, pero esa realidad no es posible edificarla sin dar cuenta y sin alimentar una memoria activa y robusta, que nos impida retroceder a las etapas más oscuras de nuestro pasado. De ahí la necesidad de huir del facilismo de olvidar para tener futuro. La conquista de la verdad, la memoria y la justicia es un gran activo político cultural de nuestro país y un ejemplo para aquellos países que, por diferentes motivos, tienen que convivir con la impunidad y la ausencia de políticas públicas de memoria, negacionismo, y relativización de los crímenes de lesa humanidad. Una memoria que se construyó sobre la justicia y no sobre la venganza es un valor inapreciable para proyectar un camino de consenso, de democracia y de paz social”.
Al finalizar las palabras de las y los oradores, se realizó la proyección del video que cierra la visita del Museo Sitio, que contiene datos sobre los juicios a los responsables de los crímenes de lesa humanidad cometidos en la ESMA, que concluyó con aplausos y emoción.
En ese momento se invitó a los y las presentes a la parte exterior del edificio donde la actriz, guionista y directora Laura Paredes, los esperaba para leer la poesía «Mañana», escrita por Loli Ponce durante su cautiverio en la ESMA, Loli permanece desaparecida.
Al momento del cierre del acto los nietas y nietos restituidos por Abuelas de Plaza de Mayo. Victoria Donda, Manuel Gonçalves, Leo Fossati, Guillermo Pérez Roisinblit, Guillermo Amarilla Molfino, Victoria Montenegro y Belén Altamiranda Taranto, acompañaron a Mayki Gorosito en las palabras de cierre del acto y agradecimiento a los y las presentes.
Fuente: Museo Sitio de Memoria ESMA