La Sala 2 de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza confirmó este viernes la condena a 3 años y nueves meses de prisión para Julieta Silva por la muerte de Genaro Fortunato, el rugbier que fue atropellado por ella frente a un boliche, en 2017 en San Rafael.
Fernando Guzzo había solicitado en Casación que la mujer fuera condenada a 14 años de prisión por homicidio agravado por el vínculo ya que considera que la muerte por atropellamiento fue intencional y no accidental.
A través de este fallo, firmado por los ministros Mario Adaro, José Valerio y Dalmiro Garay, se desestimó tanto el pedido realizado por el Ministerio Público, que pedía una condena más dura, como el de la defensa, que solicitaba la absolución.
Finalmente, el caso que conmocionó a la provincia y al país, se definió en un extenso debate en el que se determinó que Silva no tuvo intención de matar a su pareja, por lo que la Justicia le impuso una pena leve.