Jorge Martínez, instructor de vuelo de Juan Manuel Medina, el hombre de 46 años que falleció al estrellarse con una avioneta contra la planta de Air Liquid, afirmó que «no había ningún problema visible» y que la víctima «cumplió con todos los requisitos exigidos por el club» antes de emprender el vuelo este viernes al mediodía. Sin embargo, se sospecha que el accidente pudo haber sido intencional.
A las 11:50 de este viernes, una avioneta se estrelló dentro de las instalaciones de la empresa Air Liquid en Presidente Perón al 7600. El piloto, identificado como Juan Manuel Medina, de 46 años, falleció en el accidente. Por poco no se convirtió en una tragedia de mayores proporciones, ya que la planta cuenta con elementos altamente inflamables como oxígeno medicinal, nitrógeno e hidrógeno, que podrían haber generado una gran explosión si la aeronave no hubiera impactado primero contra una columna de hormigón.
Mientras se lleva a cabo una investigación judicial en la que no se descarta la posibilidad de que el incidente haya sido intencional, uno de los instructores de Medina en el Aeroclub Rosario, desde donde despegó, expresó que se trataba de «un piloto con más de 400 horas de vuelo» y que no habían observado conductas extrañas en él.
En diálogo con Telenoche Rosario (El Tres), Jorge Martínez, quien fue instructor de Medina en 2018 y 2019, señaló: «Voló conmigo en 2018, en un vuelo corto para una readaptación, y también me lo pidió en 2019. Era un muy buen piloto. En ese entonces tenía 400 horas de vuelo. Estuvo volando en estos días de acuerdo a la reglamentación del club y de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC)».
Alan Monzon
Durante la jornada del viernes, uno de los puntos analizados fue la experiencia del piloto. Al respecto, el instructor del Aeroclub Rosario, ubicado sobre la ruta 21 a la altura de Álvarez, aclaró: «Alguien deslizó por ahí que hasta era fumigador y para eso hay que tener 500 horas de vuelo. Yo descartaría que no tenía experiencia, pero no lo puedo asegurar».
Sobre las horas previas al despegue y posterior caída de la avioneta Cessna 152 contra la planta de la zona oeste, el instructor explicó: «Hoy yo estaba esperando ese avión para volar toda la tarde, hasta las 18:30, pero no llegó. Cuando empezaron a difundirse las noticias de lo ocurrido, pregunté si se había preparado el avión adecuadamente, y me informaron que cargó combustible al máximo, lo preparó bien. Aparentemente también drenó el tanque, y no había ningún problema visible. Cumplimentó con todos los requisitos exigidos por el club».
El piloto tenía que regresar al Aeroclub a las 12 del mediodía, pero eso nunca ocurrió. «El avión es excelente para escuelas, nosotros lo usamos mucho con varios instructores del club. Es una aeronave que utilizan nuestros pilotos para volar y hacer navegaciones», concluyó Martínez.