Una investigación realizada en más de 180 mil mujeres concluyó que aquellas que perdieron peso en la edad adulta media o posterior y lo mantuvieron tenían un menor riesgo de padecer la enfermedad. Cuántos kilos recomiendan perder y la importancia de sostenerlo en el tiempo19 de diciembre de 2019.
El aumento de peso en la menopausia es una cualidad bastante esperable en las mujeres, producto de los cambios hormonales propios de esa edad.
Se sabe, asimismo, que el exceso de peso corporal es una causa establecida de cáncer de mama posmenopáusico, pero se desconocía si la pérdida de peso reduce el riesgo. Hasta ahora.
Un estudio publicado en Journal of the National Cancer Institute (JNCI) y realizado por investigadores de la Sociedad Americana contra el Cáncer, la Harvard T.H. Chan School of Public Health, e investigadores de otras instituciones señaló que las mujeres con sobrepeso en la “edad adulta media o posterior” que perdieron peso y lo mantuvieron tenían un menor riesgo de cáncer de mama en comparación con las mujeres con sobrepeso que no lograron adelgazar.
Los investigadores analizaron los datos de más de 180 mil mujeres de 50 años o más a las que se evaluó el peso periódicamente, al comienzo del estudio, después de cinco años y, finalmente, nueve años después.
«En comparación con las mujeres con peso estable (± 2 kg), las mujeres con pérdida de peso sostenida tenían un menor riesgo de cáncer de mama. Esta reducción del riesgo fue lineal y específica para las mujeres que no usaban hormonas posmenopáusicas», concluyeron los investigadores.
Entre 180.885 mujeres, se identificaron 6.930 cánceres de mama invasivos durante el seguimiento.
Estos resultados sugieren, según el estudio, “que la pérdida de peso sostenida, incluso en cantidades modestas, se asocia con un menor riesgo de cáncer de mama para mujeres de más de 50 años”. “La prevención del cáncer de mama puede ser un fuerte motivador de pérdida de peso para las dos terceras partes de las mujeres con sobrepeso u obesidad”, insistieron.
¿Pero de cuánto peso se está hablando? Específicamente, los investigadores observaron que las mujeres que perdieron entre 1,8 y 4,5 kilos tenían un 13% menos de riesgo que las mujeres cuyo peso se mantuvo estable. Aquellas que perdieron entre 4,5 y 9 kilos, el riesgo se redujo a un 16%, mientras que las mujeres que perdieron más de 9 kilos tenían un 26% menos de probabilidades de desarrollar la enfermedad. Al mismo tiempo, esta tipología de mujeres continuó teniendo un riesgo reducido, incluso si se recuperaba algo del peso perdido.
Lauren Teras es la autora principal del estudio y destacó que “los resultados sugieren que incluso una cantidad modesta de pérdida de peso sostenida se asocia con un menor riesgo de cáncer de mama para las mujeres mayores de 50 años”.
El nuevo estudio es significativo porque, según la Sociedad Americana del Cáncer, es el primero con un “tamaño de muestra lo suficientemente grande como para examinar la importante pregunta de si la pérdida de peso sostenida puede afectar el riesgo de cáncer de mama con precisión estadística”.
El cáncer de mama es el más frecuente en la mujer. Actualmente en la Argentina se detectan 19 mil nuevos casos por año. Se sabe que una de cada ocho mujeres que haya alcanzado la edad de 80 años habrá desarrollado la enfermedad en algún momento de su vida. Pero lo más importante que hoy se sabe es que, detectado en estadíos iniciales, es curable en más del 95% de los casos.