El proyecto de la ley de alquileres provoca una grieta en el mercado inmobiliario. La iniciativa, impulsada por el Gobierno, busca aliviar a los inquilinos, que sostienen que cada vez es más caro y dificultoso alquilar. Los corredores rechazan la iniciativa, advierten que desalienta al mercado y remarcan que el problema de fondo es que no se le pone un freno a la inflación. La polémica está encendida con un planteo público y con intereses privados.
1 – Plazos
Extender los contratos
La iniciativa propone llevar de dos a tres años la duración del vínculo legal. Sin embargo, podría admitirse una reducción de ese plazo, con acuerdo de las partes, en casos específicos.
2 – Garantía
Nuevos avales
Según el proyecto original, el propietario debía aceptar una de las cinco opciones de garantías que le ofreciera el inquilino. Ahora se estudia que el locador pueda aceptar entre dos alternativas de garantías propuestas por los inquilinos.
3 – Comisión
A cargo del propietario
Los diputados analizan eliminar el tope de honorarios de las inmobiliarias (se había fijado inicialmente en un mes para nuevo contrato y medio mes para renovación). Se mantendrá que ese dinero sea abonado por el propietario.
4 – Contrato
Validados en la AFIP
En el texto original se establecía que solo los contratos de alquiler registrados en el entre recaudador serían válidos para el inicio de acciones judiciales. La alternativa, ahora, es eliminar eso como obligación.