Así lo aseguró Olga, una de las voluntarias de La Noche de la Caridad. “Estamos saliendo con 360, 380 viandas por día. Es un número alto y las cosas que compramos están cada vez más caras”, agregó.
Ya comenzó el otoño y los primeros días de frío se hacen sentir en la ciudad, días en los que se agudiza la difícil situación que deben afrontar las personas que viven en las calles de Mar del Plata. Olga, una de las voluntarias de La Noche de la Caridad, aseguró en diálogo con Radio Mitre Mar del Plata que “la situación es complicada, hay mucha gente en situación de calle”.
“Todas las semanas nos estamos quedando cortos con las viandas porque aparece más gente pidiendo. También algunas personas vienen a buscar para su familia. No es gente que está en situación de calle sino que no les alcanza y como sabe que nosotros estamos, se acercan a pedir su vianda. Además, tenemos más hermanos que están durmiendo en la calle“, describió en el programa Antes que sea tarde.
“Estamos saliendo con 360, 380 viandas por día, que incluyen la gente en situación de calle. Es un número alto y las cosas que compramos están cada vez más caras y los aportes, en el mejor de los casos, se mantienen. Está difícil llegar a fin de mes y muchos ya no pueden ayudar o ayudan con lo mismo que hace un año, pero ahora nos alcanza para menos de la mitad. Cambiamos el menú y buscamos alternativas y, por ahora, estamos llegando”, añadió.
El Hogar Nazaret de Cáritas Mar del Plata ubicado en Balcarce 5036, cuenta con 60 plaza que están siempre completas. “Se acerca un invierno que creemos que va a ser muy crudo y va ser duro esto. El año pasado estuvo el operativo “Cerca de Noche” del Municipio y la Provincia, y fue mejor que años anteriores. No sé este año qué va a pasar“, manifestó Olga con preocupación.
Los voluntarios de La Noche de la Caridad se reúnen en diferentes parroquias de la ciudad que se reparten las zonas a recorrer y los días de la semana. “Tenemos puntos fijos como la Plaza Rocha, el Materno y el HIGA. Y, además, tenemos lugares donde vemos que hay hermanos durmiendo en la calle, en cajeros automáticos, en entradas de edificios, en la playa. Sabemos donde duermen y nos acercamos hasta ahí en nuestros recorridos. En general, es gente sola la que duerme en la calle, a veces aparece algún familia de forma circunstancial. La mayoría son hombres“, explicó.
“Por parroquia, entre los que cocinan, los que salen y los que envuelven, sumamos 30 voluntarios por día y tenemos tres recorridos, a veces más. Nos lleva tiempo porque la idea es ir y hablar con ellos, ver en qué otras cosas los podemos ayudar, prestar la oreja para ver qué les pasa. No es un delivery de comida“, detalló.
Olga advirtió que algunas personas piden dinero en los colectivos de la ciudad en nombre de La Noche de la Caridad o del Hogar Nazaret, pero que esa no es una colecta de Cáritas. Los que quieran colaborar pueden acercar sus donaciones a Balcarce 5036 o en cualquiera de las parroquias que participan del servicio.
“Necesitamos alimentos (carne picada, fideos, arroz, aceite, caldos, verduras), ropa de abrigo, calzado, medias, bandejas descartables para microondas y manos para trabajar también”, enumeró la voluntaria.