Las imágenes del expediente que revelan el rol que tuvieron los rugbiers más complicados en el crimen de Fernando Báez Sosa.

El registro fílmico identifica a Máximo Thomsen y Ciro Pertossi al momento de la ejecución del joven de 18 años.

Mientras los diez rugbiers acusados por el asesinato de Fernando Báez Sosa se encuentran encerrados en una celda de la alcaidía del Penal de Dolores, la investigación avanza para esclarecer el grado de participación que tuvo cada uno de los imputados por “homicidio premeditado” en la golpiza mortal. Infobae accedió al expediente de la causa donde se encuentran las imágenes que revelan el rol que tuvieron Máximo Thomsen (20) y Ciro Pertossi (19), los dos rugbiers más complicados por el crimen.

Verónica Zamboni, la fiscal a cargo del caso, continúa reconstruyendo y recolectando pruebas de lo que sucedió el sábado 18 de enero antes de que culmine el plazo (martes 18 de febrero) que tiene para solicitar o no la prisión preventiva para los rugbiers. Las cámaras de la zona, y las filmaciones realizadas por testigos del hecho con sus celulares resultan piezas fundamentales para terminar de armar el rompecabezas de lo que fue aquella fatídica madrugada en Villa Gesell.

A casi tres semanas del crimen, se instruyeron siete cuerpos de expediente con 1.400 fojas, se tomaron más de 20 declaraciones testimoniales y hubo cuatro jornadas de ruedas de reconocimiento.

Las imágenes del expediente al que accedió Infobae certifican que las cámaras de la zona registraron un tumulto de gente a las afueras del boliche Le Brique a las 04.59 y detallan que entre las 05.07 y las 05.10 llegó primero un móvil de la policía y luego una ambulancia para asistir a Fernando que yacía en el suelo. Minutos antes había sucedido la brutal golpiza.

Sin embargo, los registros fílmicos esenciales provienen de un celular de un testigo que grabó el momento final del crimen. Fueron las primeras imágenes que se conocieron del homicidio; Infobae las publicó el mismo 18 de enero. Allí, los 49 segundos de duración del video son suficientes para señalar a Ciro Pertossi y Máximo Thomsen en el momento en el que ejecutan a Fernando Báez Sosa y se retiran de la escena del crimen.

En las imágenes se visualiza “un grupo de personas eufóricas, quienes propinan golpes a un sujeto que se encontraba tendido boca arriba sobre la vereda ESTE de Avenida 3”, detalla el expediente que resalta que Fernando se encontraba “en estado de inconsciencia, con su torso superior desnudo y pantalón de jeans color azul”.

El documento detalla que “se observa que se le aproxima un joven del sexo masculino, de unos 20 años de edad aproximados, de contextura robusta, cabellos rubios, pantalón bermuda de color oscuro, camisa azul manga corta y zapatillas de color negra, quien le propina golpe a la víctima y sale de imagen, haciendo constar a esta altura que este sujeto resulta ser el mismo que se observa en imágenes correspondientes al interior del local Le Brique, momento que lo retira el personal de seguridad”. La descripción corresponde a Thomsen, que tras pegarle una patada en la cabeza se retira caminando.

En el mismo registro se logra visualizar el rol que tuvo Ciro Pertossi: “Propina patada con pierna izquierda a la víctima en el rostro”, se describió en el expediente. Efectivamente, en la filmación se lo ve a Pertossi -vestido con un jean azul y camisa blanca- pateando la cabeza de Fernando y luego huyendo a paso acelerado hasta salir de escena.

Máximo Thomsen y Ciro Pertossi son los más complicados de los 10 imputados, acusados de ser los autores materiales del crimen. Una testigo los identificó como “los que más pegaron; le pisaban y le pateaban la cabeza. Los otros le pegaban piñas por todos lados a Fernando”, reveló la chica que presenció el hecho, quien agregó que Thomsen le respondió a un tercero que lo incitaba a matar: “Quedate tranquilo que a este me lo llevo de trofeo”.

Otros dos testimonios que se sumaron a la causa, de dos chicos que estuvieron presentes en el momento del asesinato, también lo ubicaron a Thomsen como uno de los más agresivos: “Decía: ‘Dale, cagón, levantate’. Cuando Fernando estaba en el piso, el único que vi que le pegó en la cabeza fue el chico de camisa negra”, señaló uno de ellos.