El joven se negó a que le extrajeran sangre para completar las pericias y dijo que no “estaba corriendo una picada” sino que el auto se le fue cuando agarró un bache.
«Perdí el control del auto», declaró Sasso, quien negó haber estado corriendo una picada.
Desde entonces, Sasso cumple prisión preventiva en la Estación Comunal de Balcarce. Sin embargo, esta semana se conocieron los privilegios con los que contaba en su encierro: no compartía el menú con los demás detenidos, mataba el tiempo jugando a la Play Station en el departamento del primer piso que le prestaba el comisario, y cuando quería, salía a dar una vuelta.
Ante estas irregularidades, el Ministerio de Seguridad desafectó a siete policías, incluidos dos comisarios, a quienes se les atribuye que “dejaban salir a los presos por unas horas a cambio de dinero”.
Esta es la locura de la Justicia…… la Madre denunció todo esto.. .. hay razones para dudar… muchas…. ????….
S.F.