Hollywood y el mundo del cine se visten de luto tras el fallecimiento de la legendaria actriz Diane Keaton a los 79 años, ocurrido el pasado 11 de octubre. Ganadora de un Premio Óscar, Keaton deja un legado imborrable que abarca cinco décadas y redefinió la imagen de la mujer moderna y auténtica en la pantalla grande.

Conocida por su estilo tomboy y su inigualable carisma, Diane Keaton alcanzó la fama mundial con su icónico papel de Kay Adams Corleone en la trilogía de El Padrino y, sobre todo, con Annie Hall (1977), la película de Woody Allen que le valió el Óscar a Mejor Actriz y transformó para siempre la comedia romántica.
A lo largo de su carrera, demostró una versatilidad única, destacando tanto en dramas intensos como en éxitos de taquilla como Alguien tiene que ceder y El Club de las Primeras Esposas. En sus últimos años, continuó activa, participando en películas como Summer Camp y Arthur’s Whisky (2024).
Su legado no se limita a la actuación: fue directora, productora y una defensora de la autenticidad, resistiéndose a los mandatos de Hollywood. Diane Keaton será recordada como una figura que aportó profundidad, humor y una personalidad única a cada uno de sus roles.