Lo dispuso la Justicia. Son tres nenas, una con una discapacidad severa, y un varón. Tienen 14, 11, 7 y 3 años y ya no iban ni a la escuela ni al centro de salud.
La justicia determinó que cuatro hermanos fueran retirados de manera «urgente»del cuidado de su madre, con la que convivían en un escenario de extrema pobreza y marginalidad en la zona oeste de la ciudad.
La medida de excepción de protección fue tomada por el Tribunal Colegiado de Familia Nº 7 y aborda la situación de tres chicos (un varón y tres nenas) de 14, 11, 7 y 3 años, uno de ellos con una discapacidad severa.
La coyuntura por la que atravesaban venía siendo alertada por la red de salud de la zona, que había detectado afecciones y carencias sanitarias y alimentarias, y había encendido las alertas al percibir las interrupciones en su escolarización.
Si bien la Subsecretaría de Niñez de la provincia ya había abordado el caso, ante la continua vulneración de derechos a la que se veían expuestos los niños, la Justicia dispuso sacarlos de la vivienda de Juan B. Justo al 8500 y dejarlos bajo el cuidado del organismo de la provincia.
La casa en la que vivían es una humilde estructura de chapa y madera que está ubicada a pocos metros de donde la calle se encuentra con el arroyo Ludueña, en el sector del asentamiento conocido como La Bombacha.
Los niños vivían con su mamá, de 38 años, y la pareja de la mujer. El mayor, un varón de 14 años que no estaba en el momento en que se dio cumplimiento a la medida judicial, y tres nenas: una de 11, otra de 7 que padece un trastorno neurológico y motriz severo, y la menor de 3, que se encontraba hospitalizada por infecciones recurrentes.
Niñez ya había iniciado un trabajo de asistencia conjuntamente con el centro de salud Ceferino Namuncurá, al que asistía la familia, fundamentalmente por la situación de vulnerabilidad en la que se encontraba la nena de 7 años ante su discapacidad.
Sin embargo, en los últimos meses había dejado de recibir la asistencia que su cuadro requería, lo que de alguna manera determinó la medida judicial.
En riesgo
«Hablamos de un ambiente familiar extremadamente riesgoso y de insalubridad absoluta», afirmó la responsable de Asuntos Juveniles de la Policía, Mariel Arévalo, la funcionaria que llevó adelante el operativo en el cual se retiró a los niños del hogar, quien remarcó «la situación de extrema vulneración de derechos» en la que se encontraban.
Los policías tuvieron que llegar acompañados por médicos del Sies y el Cuerpo de Guardia de Infantería, ya que semanas atrás se había producido una situación de resistencia por parte de los adultos.
Arévalo no se sorprendió por la ausencia del mayor de los hermanos. «Sabíamos que esto podía suceder, ya que se trata de un adolescente que suele ausentarse de la casa y deambular», contó y señaló que la menor de las nenas «estaba hospitalizada, ya que se encontraba con un cuadro infeccioso, una de las afecciones que sufre en forma recurrente».
La nena de 7 años sí se encontraba en el lugar, ya que si bien tiempo atrás era trasladada a un centro educativo terapéutico donde recibía la asistencia requerida, los informes indican que tanto la prestación en el centro como los traslados, fueron dados de baja.
Revinculación
Las nenas fueron trasladadas a un efector de Salud Pública para «constatar su estado general y una vez que sean dadas de alta se alojarán en una residencia», señaló a LaCapital Claudia Aguilera, directora de Niñez.
Desde ahora los chicos estarán a cargo de la repartición provincial y, como anticipó la funcionaria, «se trabajará conjuntamente con la familia para determinar si en el plazo planteado se puede lograr un retorno al seno familiar, o bien si hay que trabajar con algún otro referente del grupo».
Fuente: La Capital
